Las Madres

Autor:  Diácono Lorenzo Brizzio

 

 

Todos tenemos una madre, ser único que tiene de Dios la gracia divina, ella y solo ella, la mujer,
puede ser madre, allí el principio de la vida, y en seno materno grávido de vida, amor y ternura, es donde se gesta el ser humano.
Así pudimos decir cuando comenzamos a hablar “Mamá”, palabra que tiene de Dios todo el amor.
Así también hay diferentes palabras para definir a la madre acorde sea el nacimiento que se ha tenido.
Si ha sido parido, podrá decir que es nacido.
Si ha sido retirado del vientre materno, por causas no naturales habrá sido “nonato”, no nacido.
Si fue concebido con amor y respeto, pero por razones de la naturaleza ese vientre materno pudo retenerlo por el periodo de gestación, habrá sido abortado naturalmente.
Si fue concebido por el placer sexual, producto del liberalismo, el alcohol, la droga u otra razón, y esa mujer, por esa razón no desea ser madre, reniega así de Dios la gracia, y se aleja de Él para no sentir la culpa del acto que concibe su mente, y cuando ese acto se lleva a cabo con el fin de producir, el aborto, allí muere un hijo, y nace una infanticida.

Cuando la madre parió a su hijo, o éste nació por cesárea, será ella madre y él, hijo.
Cuando la madre aborta por la naturaleza, ella será madre y él, por gracia divina un ángel de Dios.
Cuando la madre aborta por rechazo a su maternidad, ella siéndolo, no podrá decirse madre y él, por la misericordia de Dios, será ángel dilecto en el cielo.
Cuando una madre abandona su hijo, ella será madre, pero su hijo podrá renegar de ella, y amar a otra que no es su madre, como tal.

Al celebrar una vez al año el día de Madre, podremos separar así este imperfecto resumen:
Las madres que tuvieron a sus hijos con amor, tendrán de ellos el reconocimiento y de Dios la gracia.
Las que la naturaleza les impidió tener ese hijo, ellas podrán con una flor, ofrecer en ese día su amor a quien en el cielo está y recibir de Dios la resignación.
Aquellas que abortaron rechazando su maternidad, tendrán en ese día el remordimiento en su corazón y solo podrán obtener de aquel ángel, su perdón, cuando su arrepentimiento sea total y sincero.
Aquellas que abandonaron a sus hijos, podrán recordarlos pero pocas veces obtendrán el reconocimiento de Dios, pero podrán buscar y lograr el perdón de sus hijos y por ellos el perdón de Dios.  

Felicidades a la Madres que concibieron, amantaron y amaron a sus hijos…
Paz, consuelo y gracia divina, para aquellas que deseándolo no pudieron tener a sus hijos…
Piedad y deseo de que sean perdonadas aquellas que a sus hijos abandonaron…
Misericordia de sus hijos abortados, y perdón de Dios por el reconocimiento de sus infanticidios con un corazón contrito, para aquellas madres que buscan paz, perdón y misericordia en sus corazones…

Ya que el día de la Madre se anexa por añadiría al padre, para ellos, en el lugar que les corresponda, según sea su paternidad en grado a las madres arriba mencionadas, sea para ellos de Dios y de sus hijos, igual el premio como el castigo…

A ti madre mía, gracias por haberme parido, gracias por ser tu hijo, gracias Dios mío por ello.

                                                              
                                                 lorenzo 16/10/2007