Humo blanco

Autor:  Diácono Lorenzo Brizzio 

 

 

Un cielo expectante, una tierra anhelante…
Miles de ojos elevados a la chimenea…
Negro…, negro…, el humo que el viento lleva…
Rostros que vuelven a mirar al suelo, labios oran en silencio…
 
El reloj de a cúpula, también el del tiempo parecen detenidos…
El cansancio no puede con los fieles que allí están…
Allí, y en el mundo entero todos son sostenidos por el mismo deseo…
Que el negro humo se transforme en blanca nube de esperanza…
 
El gentío mundano apuesta por ese o aquel…
El conclave busca entre ellos a quien designaran…
Las horas se consumen, también la ansiedad consume a la multitud…
De pronto un grito…, humo blanco…, humo blanco “habemus papa”
 
La sencillez se hace presente en el balcón…,
La serenidad en su rostro, la seguridad en sus palabras…
Deja allí el nombre recibido en su Bautismo: Jorge…
Toma el de su papado, Francisco, signo de lo que vieron mis ojos en Él…
 
Gracias Dios mío, por la gracia de haberme concedido un nuevo PAPA…
 
                                                                 lorenzo  16/03/2013