Autor: P. Guillermo Serra, L.C.; publicado originalmente en:
http://www.la-
La mirada es un mapa del alma, una ventana al corazón de cada persona. Hay
miradas tiernas que acogen. Hay miradas también duras que alejan y que separan.
Miradas limpias que dan y miradas que roban. Miradas que llenan y miradas que
dan miedo.
Mirar a Jesús en la
oración
es descansar los ojos del corazón en los suyos y entrar
así en su corazón humano. Es contemplar el paisaje de su
amor
cada día distinto,
nuevo, lleno de color y belleza.
¿Qué ojos podemos ver en la oración?
o
Ojos que se agachan
para escribir mi nombre en el polvo y levantarme con su
mirada y así ser restaurado con su mirada (Jn 8, 10: ¿mujer quién te condena?)
o
Ojos que lloran
la pérdida de su amigo, lágrimas que escriben ríos de amistad en
cada uno de nuestros corazones. Te amé y lloré por ti. Te amo y lloro por ti y
contigo (Jn 11, 35: resurrección de Lázaro)
o
Ojos que desde lo alto de la cruz reflejan el cielo
y gritan con amor: "en
verdad te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lc. 23, 43: buen ladrón)
o
Ojos que sueñan proyectos de amor
, que penetran corazones y resucitan vidas
muertas por el
pecado.
Miradas que mezcladas con palabras atraen la voluntad
como un imán y crean discípulos incondicionales (Mt 9, 9: "viéndolo le dijo
sígueme...",
vocación
de Mateo)
o
Ojos que conocen historias y nombres
, miedos y sueños, angustias y
esperanzas.
Miradas que se alzan al cielo y crean amistadas que perduran hasta la
eternidad (Lc 19, 5: encuentro con Zaqueo)
Ojos que abrazan
, ojos que sonríen, ojos que simplemente son ventanas a un
corazón de niño que con sencillez y gozo pide que los niños se acerquen a Él porque
de ellos y de su sencillez es el Reino de los cielos (Lc 18, 16)
Ojos que perdonan
, que cruzan miradas, aceptan límites, renuevan esperanzas.
Ojos que traspasan corazones, que ven bondades ocultas y reales y acogen 70
veces 7, es decir, siempre (Mt. 18, 21-22: Pedro)
Ojos que siembran
, que riegan, abonan y esperan hasta que la mies esté lista
para la cosecha (Mt. 13)
Ojos que buscan la oveja perdida
, la persigue con la mirada para que no se
pierda. Ojos que ven en la oscuridad porque el amor siempre vela. Pastor que guía
su rebaño con sus ojos de bondad y compasión (Jn 10)
Ojos que presentan su cuerpo y su sangre
al Padre anticipadamente. Ojos que
se ven reflejados en el
sacrificio
y que gimen y lloran porque no todos lo comerán,
no todos lo beberán. Ojos que se ofrecen en
memoria;
ojos que recuerdan y son
recordados; ojos que se entregan, mirada que se funde con la nuestra en la
Eucaristía.
Mi mirada en su corazón y tu mirada en el mío (Lc 22, 19-20)
Ojos que fueron mirados por María
y ojos que miraron a María. Ver sus ojos es
ver reflejada a la Madre y ver los ojos de María es encontrarse con los de Jesús (Jn
19, 25-27).
Ojos que te miran oh hombre y mujer, ojos que te espera
. Ven, tenemos
siempre abierto a un corazón cuya ventana es su mirada y te espera en el
Sagrario.
Para la oración
¿Qué mirada de Jesús has conocido en tu vida?
¿Cómo te ha mirado Jesús y cómo les has mirado?