Voz del Papa
En la Jornada Mundial de la Juventud
José Martínez Colín
1) Para saber
El Papa Francisco acudió a celebrar la XXXI Jornada Mundial
de la Juventud en Cracovia, Polonia. Su lema fue “Bienaventurado
los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia” (Mt 5, 17),
que dentro del Año de la Misericordia, es un verdadero Jubileo de
los Jóvenes a nivel mundial.
Decía el Papa que en el concepto bíblico de misericordia está
incluido lo concreto de un amor que es fiel, gratuito y sabe
perdonar. Por ejemplo, en el profeta Oseas hay un hermoso ejemplo
del amor de Dios, comparado con el de un padre hacia su hijo:
«Cuando Israel era niño, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.
Pero cuanto más los llamaba, más se alejaban de mí; [...] ¡Y yo
había enseñado a caminar a Efraím, lo tomaba por los brazos! Pero
ellos no reconocieron que yo los cuidaba…, me inclinaba hacia él y
le daba de comer» (Os 11,1-4). A pesar de la actitud errada del hijo,
que bien merecería un castigo, el amor del padre es fiel y perdona
siempre a un hijo arrepentido. En la misericordia siempre está
incluido el perdón.
Misericordia que vine a mostrarse en plenitud en el Nuevo
Testamento con la encarnación del Hijo de Dios. Como dice el Papa
Francisco, Jesús mismo es la misericordia.
2) Para pensar
En su mensaje para esta Jornada, el Papa recordó una
experiencia personal con la misericordia de Dios.
“A la edad de diecisiete años, un día en que tenía que salir con
mis amigos, decidí pasar primero por una iglesia. Allí me encontré
con un sacerdote que me inspiró una confianza especial, de modo
que sentí el deseo de abrir mi corazón en la Confesión. ¡Aquel
encuentro me cambió la vida! Descubrí que cuando abrimos el
corazón con humildad y transparencia, podemos contemplar de
modo muy concreto la misericordia de Dios. Tuve la certeza que en
la persona de aquel sacerdote Dios me estaba esperando, antes de
que yo diera el primer paso para ir a la iglesia. Nosotros le
buscamos, pero es Él quien siempre se nos adelanta, desde siempre
nos busca y es el primero que nos encuentra. Quizás alguno de
ustedes tiene un peso en el corazón y piensa: He hecho esto, he
hecho aquello... ¡No teman! ¡Él les espera! Él es padre: ¡siempre
nos espera! ¡Qué hermoso es encontrar en el sacramento de la
Reconciliación el abrazo misericordioso del Padre, descubrir el
confesionario como lugar de la Misericordia, dejarse tocar por este
amor misericordioso del Señor que siempre nos perdona!”
3) Para vivir
El Papa Francisco invita a suplicar al Señor que nos dé la
gracia de ser misericordiosos con quienes nos hacen daño. Como
Jesús que rezaba por los que le habían crucificado: «Padre,
perdónalos, porque no saben lo que hacen» (Lc 23,34). El único
camino para vencer el mal es la misericordia. La justicia es
necesaria, pero no basta. Justicia y misericordia tienen que caminar
juntas: “¡Cómo quisiera que todos nos uniéramos en oración
unánime, implorando desde lo más profundo de nuestros corazones,
que el Señor tenga misericordia de nosotros y del mundo entero!”
El Papa, por último, recordó a Maciek, el joven que diseñó las
banderas, imágenes, el kit del peregrino y otras cosas. Y que gracias
a este trabajo reencontró su fe antes de morir. Una historia
conmovedora que trataremos para la próxima vez.
José Martínez Colín es sacerdote, Ingeniero (UNAM) y Doctor en Filosofía (Universidad de Navarra)
( articulosdog@gmail.com )