EL PAÍS DE  NUNCA JAMÁS

 

Me preguntaste si Peter Pan había existido.

Me preguntaste dónde quedaba el país de Nunca Jamás.

Me preguntaste por qué Peter Pan podía volar.

Me preguntaste por qué nuca se veía a Campanita por aquí.

Me preguntaste por qué el Capitán Garfio le tenía miedo a los relojes.

Te dije no sabía si podría contestar todas tus preguntas pero lo habría de intentar.

Peter Pan es un cuento donde se habla de ustedes, los niños.

De alguna manera, él es cada uno de los niños que saben disfrutar su ser niños.

Existen, también, adultos que saben conservar a ese niño que todos llevan dentro.

Son los adultos que no tienen miedo a correr aventuras y las disfrutan.

El niño de los adultos, muchas veces, por las cuestiones de la vida se queda arrumbado en el interior de algunas personas y se olvidan de él.

Tanto ser niño como ser cuidadoso del niño interior es una aventura que se debe saber vivir.

Es una ventura donde no faltan los peligros como las cosas extraordinarias.

Campanita es quien ayuda a que esas aventuras se puedan vivir con coraje y convicción.

Campanita es quien, con su polvo dorado, ayuda a que no se tenga miedo ante lo que toca vivir para lograr el éxito.

Campanita siempre hace sonreír y no perder de vista los sueños.

El país de Nunca Jamás es, según el cuento, ese lugar donde los niños por siempre son niños.

Allí no pasa el tiempo y jamás pierden la alegría, las ganas de estar juntos o la fuerza para no bajar los brazos.

En ese lugar todos se ayudan a superar las dificultades y a que todos puedan estar felices.

Es como debería ser en la vida real.

Nada debería quitarnos la alegría, nunca deberíamos dejar de ayudarnos los unos a los otros, nunca deberíamos bajar los brazos ante las situaciones adversas.

El Capitán Garfio representa a todos los adultos que se empeñan en hacer que los niños se vuelvan malos y, así, pierdan su niñez.

Grafio tiene miedo a los relojes porque, con su maldad, ha dejado de ser niño y el tiempo pasa para él.

Grafio, en cierta medida, representa a los adultos que están más ocupados por las cosas que por la felicidad.

Es esa persona que no puede ver felices a los demás y hace de todo por hacer  todos vivan tristes.

Se olvidó del niño interior y vive preocupado porque el tiempo pasa, se va volviendo anciano, y no ha logrado su objetivo de vencer a Peter Pan.

Dejé para último tu preguntarme por qué Peter Pan vuela.

No solamente él vuela, tú también puedes volar.

Puedes volar por sobre todo lo que te rodea para llegar a un mundo especial.

Un mundo donde todo es una larga e interminable aventura.

Un mundo donde no hay peleas ni discusiones.

Un mundo donde todo hace que uno ría a carcajadas.

Un mundo donde el amor nos una y acompañe.

Vos también puedes volar dándole alas a tus sueños y no dejando que estos se apaguen.

Para vos, también, todo lo del país de Nunca Jamás será realidad y así serás MUY FELIZ NIÑO.

 

Padre Martín Ponce de León S.D.B.