PAREDES DEL TEMPLO
Padres Pedrojosé
Ynaraja
Una sola vez,
según la traducción de la “Biblia de Jerusalén”. Ahora bien, los autores, las
enciclopedias, dicen que en el texto se trata en realidad del ciprés, otras
comentan que aparece en diversos lugares más. Dice algún autor que su madera no
tiene uso en carpintería o ebanistería y digo yo que precisamente su aroma la
hace muy apta para recubrir paredes de palacios o del Templo, tanto por su
perfume, como por serlo él apropiada para alejar parásitos, ávidos siempre de
celulosa, totalmente inodora de los otros árboles, que sí les gustan.
Decía al
principio que es de buen porte, visto de lejos y arisco al tacto, como también
lo es el cedro. Si bien son semejantes a la vista, el enebro carece de las preciosas
piñas que adornan fugazmente al cedro, además de su tamaño, favorable a este.
EL GINTONIC
Vuelvo a la
bebida y lo hago porque si bien es bastante desconocido o difícil de
diferenciar, el enebro, su fruto, la nebrina, macerada en alcohol, será
componente obligatorio de cualquier licor que quiera denominarse ginebra o gin
y que goza de tal “personalidad” que mezclada con agua tónica recibe el popular
nombre de gintonic, que debe servirse en un vaso
tubo, si uno quiere ser fiel a las normas sociales. Aunque hay quien dice que
de no hacerlo así, no se aprecia el genuino sabor.
MACERACIÓN
Hablo de
maceración de las nebrinas, no de destilación, como es común la obtención de
muchos licores o aguardientes. Si menciono este detalle es porque un
acompañante me lo preguntó, extrañándose en su imaginación, de que de un fruto
tan pequeño y molesto de recolectar, pudiese sacar algo comerciable. Pese a que
estaba sólo convencido, le dije que no, pero en llegando a casa, para estar
además seguro, busque en enciclopedia y me cercioré de lo que había dicho. No
puedo olvidar que también decía, y lo copio a favor de mi colega, que un señor
llamado Behrend, “obtuvo con 128 kilos de zumo de
nebrina 18,75 litros de alcohol y lo analizó. Se trataba de una curiosidad
científica. Pero la ginebra no se obtiene por fermentación y posterior
destilación de ese zumo” ya sé que me he repetido en lo segundo, pero he sido
fiel al párrafo-fuente.
El fruto del
enebro es calificado de “baya”, cuando no es una “baya”, sino una “gálbula”; es
decir, un fruto del estilo del que produce el ciprés, que es de la misma
familia. Ya he dicho que es pequeño y añado que la misma enciclopedia lo
calibra como de 4 a 12 mm de diámetro.
EN LA BIBLIA
Acabo
añadiendo citas según otras traducciones. Puede servir la maniobra como
demostración práctica de que el texto bíblico no es siempre exacto en todas las
traducciones, continuando ser verdadero en sus contenidos
Jeremías 48:6 “Huid, salvad vuestras vidas,
sed como un enebro en el desierto.
¡Huyan!
¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como la zarza en el desierto!
Huid, salvad
vuestra vida, y sed como retama en el desierto.
¡Huyan!
¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como las zarzas del desierto!
48:4 La
versión griega dice sus gritos se oyen desde tan lejos como Zoar.
48:6 O Escóndanse como un burro salvaje; o Escóndanse como un arbusto enebro; o
Sean como [la ciudad de] Aroer. El significado del
hebreo es incierto. 48:9 O Pongan sal sobre Moab, /
porque será arrasada. 48:13 En hebreo se avergonzó...
6 Huid,
salvad vuestras vidas, sed como un enebro en el desierto.
6 Huid,
salvad vuestra vida, y sed como retama en el desierto.
(El-libro-del-pueblo-de-Dios)¡Huyan,
sálvese quien pueda, como un matorral en el desierto!
(Biblia América Latina) Huyan! ¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como las zarzas del desierto!
1.
”Dense a la fuga;
provean escape para sus almas, y deben llegar a ser como un enebro en el
desierto. Porque tu confianza está cifrada en tus obras