EL
AVEMARÍA DE LA ASUNCIÓN
Padre Pedrojosé Ynaraja Díaz
La tradición,
los evangelios apócrifos, sitúan la dormición de María en el Cenáculo, en el
mismo lugar que el Pentecostés. María, según estas fuentes, se encontraba en el
momento de la «dormición» rodeada de los discípulos de su Hijo, que habían sido
convocados para el momento por los ángeles.
Fue depositada
en un sepulcro a la vera del torrente del Cedrón, a un centenar de metros de
Getsemaní. Pedro el diácono habla de ello y también el de Piacenza. Las
recientes investigaciones del P. Bagatti dan como
auténtico lo que hoy visitamos, propiedad de las Iglesias Ortodoxas Griega y
Armenia, que la comparten con la Copta y la Siríaca.
YO TE SALUDO
Saludar, como
bendecir, es desear el bien. Mas en este caso el
saludar es solicitar tu atención, esperando que por unos momentos, te fijes en
nosotros. Salúdanos tú a nosotros, Señora nuestra, y nos sentiremos
satisfechos. Una mirada sonriente es lo único que queremos.
MARÍA
De todas las que
así se han llamado eres tú, la qué viviste casada muchos años en Nazaret,
casada con José el humilde artesano, la más importante de todas las que ha
habido y con la que ahora queremos hablar. María de Nazaret, escucha nuestra
oración.
LLENA DE GRACIA
Nosotros tenemos
dinero, títulos académicos y hasta algunos, no muchos, títulos nobiliarios,
propiedades, muebles e inmuebles, bienes, fungibles y duraderos. De esto
tuviste muy poco y careciste de conocimientos eruditos. Pero tú tuviste,
tienes, lo que más importa, que es la Gracia. Este valor no cotiza en bolsa, no
se conserva en cajas de caudales ni se guarda en frigoríficos. Únicamente se
conserva en el corazón de la persona santa. Con frecuencia nos olvidamos
nosotros de la Gracia. Tú de ella estás del todo llena. Nosotros ¿cuánta
tenemos? ¿Nos planteamos siquiera la precariedad de su existencia? Ya que tú de
ella posees tanta cantidad, sé generosa y obtén una poca para cada uno, María
amiga nuestra.
EL SEÑOR ESTÁ
CONTIGO
Lo tuviste nueve
meses en tu seno, lo tuviste unos cuantos años a tu lado, lo tuviste muy cerca
de ti en la cruz, agonizando. También estuvo cerca de ti cuando lo llevaban a
enterrar. Lo tienes contigo, ahora que te ha llevado con Él al Cielo. No está
tampoco lejos de nosotros, pero su proximidad ciertamente no es como la tuya.
Haz, María, que tu Hijo permanezca cerca de nosotros algo así, ya sabemos que no
tanto, como está contigo en las alturas.
BENDITA TÚ ENTRE
TODAS LAS MUJERES
En nuestra
sociedad algunas mujeres tienen protagonismo, son esbeltas modelos gráciles
como un junco y fuertes como una palmera, artistas de cine de apasionada y tal
vez turbulenta vida, esposas, intrigantes a veces, de hombres famosos, reinas,
princesas... De las otras, de las que su vida es oscura fidelidad o suave
mediocridad, se habla poco. Aunque éstas sean muchas veces apreciables y
útiles, aunque sean atractivas y majas desbordantes, aunque sean sencillamente
madres, aunque se desvelen por la ciencia en sencillos trabajos rutinarios,
aunque solo sean equilibradas artistas, aunque sean solo gente buena, de buen
corazón. Se habla poco de ellas y, no obstante, son estas las mujeres
imprescindibles para el progreso humano. Y tú eres una de éstas, la más
importante y un tanto diferente.
De ti se habla y
se habla siempre bien. Nadie dice de ti que seas tonta o mala, ni siquiera
frívola o mediocre. Y es que se te reconozca o no, eres la más importante de
todas ellas, de las famosas y de las anónimas. María, queremos unirnos a los
que te dedicaron himnos, a los que por todo el mundo te dirigieron su oración,
a los escultores, a los pintores, a los tallistas, a todos los que con su ingenio,
con su piedad, con su imaginación, hicieron de ti el centro de su interés
durante toda su vida o aunque sea solo por un momento. Con todos ellos queremos
entronizar una imagen tuya en nuestro interior.
BENDITO EL FRUTO
DE TU VIENTRE: JESÚS
Ya sabes que
algunos, que por la fe están muy cerca de tu Hijo, quieren ignorar el papel
importante que desempeñas en la vida de la Iglesia y de los hombres. Aunque
quieran olvidarte, ya que aman a Jesús, tú quieres para ellos la gracia que El
procura y te encuentras a su vera, al orar ellos. Nosotros, que hemos hecho de
tu Hijo el centro de nuestra existencia, queremos estar también contigo, para
que nos protejas del peligro que tenemos de alejarnos un día de Él. María, la
madre de Jesús, asumida con Él al Cielo, no te olvides nunca de nosotros.
SANTA MARÍA,
MADRE DE DIOS
¡Cuántas
explicaciones nos dan si queremos estudiar el significado de estas palabras y
tú en cambio, cuando las escuchaste de Isabel, las aceptaste con sencillez!. Y cantaste sin captar seguramente el sentido, la grandeza
total y la importancia del momento. Mana, ayúdanos a recibir con simplicidad,
con la misma ingenuidad que tú tuviste, al mismo Dios y a los hombres si algún
día cantan pequeñas alabanzas de nosotros.
RUEGA POR
NOSOTROS AHORA
No sabemos más
que pedir cuando estamos en tu presencia. En otros momentos quién sabe lo que
nos creemos ser, pero a tu lado, es tan pequeña nuestra pequeñez, que no vemos
más que tu grandeza, tu generosidad y nuestra indigencia. María, no te olvides,
ruega ahora por nosotros.
Y EN LA HORA DE
NUESTRA MUERTE
Moriremos, con
toda seguridad. Tú, según la tradición, «te dormiste» no sabemos de qué manera.
Nosotros tal vez vayamos a parar, nuestro caduco cuerpo claro está, a un
cementerio (cementerio quiere decir dormitorio y así en algo nos asemejamos a
ti). O nuestro cuerpo se destruirá de otra manera. Tu fuiste llevada al Cielo. Pero aun así la muerte no
fue extranjera para ti. Conociste la muerte de tu Hijo, muerte horrorosa, por
el dolor y la humillación que en ella había. La muerte de al menos algunos de
los amigos de tu Hijo, de los que como Santiago o Esteban fueron mártires
valientes, y de los que fueron esforzados y constantes testimonios.
Acuérdate de
nuestra muerte, tú que desde el Cielo eres ya privilegiada espectadora y
protégenos, María, Madre de la Resurrección por ser madre del Resucitado.
Estate a nuestro lado en aquel momento tan importante de nuestra existencia.