Empezando un nuevo Día

Autor: Arturo Quirós Lépiz

Web: Mensajes de vida

 

 

Salió el sol o amaneció con lluvia, nieve o solo neblina. Una mañana mas con la que las promesas de Dios se renuevan una vez mas.
El amor de Dios, incomparable y maravilloso está listo para ser regalado a todos a quienes deseen recibirlo.
Espero que el día de ayer hayas tenido la gran oportunidad de comunicarte con Dios en una sencilla oración, que no es mas que hablar con Jesús como hablas con cualquier persona en tu diario vivir.

Hoy Jesús nos habla directo y claro. «No llores» nos dice en el Evangelio, seguido por un «a tí te digo, LEVÁNTATE». Y no porque no le importen tus problemas, o no vea que son importantes, sino por el contrario, porque se compadece contigo. Compadecer NO ES tener lástima, porque nunca Dios sentirá lástima por su hija o hijo amado. No, compadecerse es 
que "siente contigo" y te acompaña en tu dolor. La real academia española define compadecer como : Compartir la desgracia ajena, sentirla, dolerse de ella.

El comprende tus necesidades pues fué humano con tú y el dolor, el miedo, la soledad, la insertidumbre o el rechazo fueron sentimientos que Jesús vivió intensamente por su misión. 

El desea acompañarte y compartir tu carga, no caminar delante sino a tu lado, deseando llenarte del mas grande amor.

Permite a Jesús ayudarte en tu camino no para que sientas lástima de tus problemas, sino para que puedas levantarte como una vencedora, como un hombre victorioso. Como hijos de Dios!

Que en este día todo lo que realices sea bendecido y guiado por la mano de Jesús.