Primero Dios

Autor: Arturo Quirós Lépiz

Web: Mensajes de vida

 

 

Cuentan que cierta vez un padre tuvo un gran favor de Dios en su trabajo y había prometido orar aquella noche para agradecer a Dios. Esa noche, el hijo pequeño no dejaba de correr para un lado y para otro, finalmente, el pequeño se durmió en los brazos de su padre pero cada vez que el hombre trataba de levantarse el niño se despertaba y lloraba.

Aquel hombre no podía mas que ver como cada vez era mas y mas tarde sin poder haber agradecido a Dios la bendición en su trabajo. Finalmente el hombre decidió orar desde su silla con su hijo en brazos y mientras lo hacía, miró al pequeño y como le abrazaba, sus ojos y sus pequeñas manos. Empezó entonces este hombre a dar gracias pero por sus hijos, su esposa, su familia y agradeció profundamente a Dios por todos ellos. Al terminar el niño quedó profundamente dormido y el hombre sorprendido comprendió, que antes de cualquier bien material el mayor tesoro y bendición que tenía que agradecer era su familia.

Hermanos, no olvidemos nunca que por mas bendiciones económicas que Dios nos de, siempre lo primero en nuestras mentes debe ser agradecer por otras cosas como la familia, la salud y la misma gracia de Dios.