Problemas grandes, grandes soluciones

Autor: Arturo Quirós Lépiz

Web: Mensajes de vida

 

 

Saludos y bendiciones para todos ustedes mis amadísimos hermanos.
Inicia una nueva semana y con ella muchos retos, trabajo por delante y ante todo, misericordia y gracia de Dios para con todos nosotros.

He recibido mucha correspondencia recientemente de receptores quienes me comentan situaciones difíciles que están pasando. 
Cuando leo estos correos me doy cuenta de cuanto necesitamos todos del Señor y como muchas personas realmente tienen pruebas grandes, y mucho delante de ellos. Barreras y obstáculos mas grandes que nuestras propias fuerzas.

Y es que en realidad hermanos, somos tan pequeños delante del Señor. 
Tan insignificantes que no podemos hacer nada por nosotros mismos y para todo dependemos de la luz de Cristo que nos guía, y ese, es el primer paso para salir adelante en cualquier problema. Reconocernos hijos de Dios, necesitados y de su ayuda y gracia, pues no solo significa reconocer nuestra pequeñez, sino la GRANDEZA Y PODER de Dios.

Cuando recurres al Señor, te conviertes en un hijo o una hija que conoce tener un Padre celestial que no solo es todopoderoso, sino que también te ama como nadie podrá hacerlo.

Amiga y amigo, no importa que tan grande sea tu problema o si lo has sufrido durante mucho o poco tiempo, puedes estar seguro y segura que Dios te escucha y que cuando clamas al cielo, Jesús está a tu lado abrazándote y confortándote.

Si te da la solución o no, depende de tu fé y de la gracia de Dios para tu vida y como quiere perfeccionarte, pero si no ves la respuesta nunca creas que Dios no te escucha, que no te ama o que no eres importante. 
Solamente que Dios tiene un tiempo y un momento para todo y en nuestra humanidad, no siempre podemos encontrarle forma a Dios.

No estás sola. No te has quedado solo. Cierra tus ojos, tranquiliza tus sentidos y te darás cuenta que Jesús está a tu lado, siempre ha estado ahí.