Eso se llama Fé

Autor: Arturo Quirós Lépiz

Web: Mensajes de vida

      

Leí hace poco el siguiente texto en la Biblia, Sn Jn. 4.47-53 :

Había un funcionario real de Carnaúm que tenía un hijo enfermo. Al 
saber que Jesús había vuelto a Judea de Galilea, salió a su encuentro para pedirle que fuera a sanar a su hijo, que estaba muriendo.


Jesús le dió esta respuesta: "Si ustedes no ven señales y prodigios no creen". El funcionario le dijo : "Señor, ten bondad de venir antes de que mi hijo muera". Jesús le contestó: "Puedes volver, tu hijo está sano".


El hombre creyó en las palabras de Jesús y se puso en camino. Al llegar a la
bajada de los cerros, se topó con sus sirvientes que venían a decirle que su
hijo estaba sano. Les preguntó que a que hora se había sanado el niño y le
contestaron: "Ayer, a la una de la tarde se le quitó la fiebre". El padre
comprobó que a esa hora Jesús le había dicho: "Tu hijo está vivo".

Palabra de Dios

¿Saben? Temo no poder parar de escribir sobre este texto.


¿Podemos pensar en este hombre que fué delante de Jesús, caminando mas 
de un día para pedirle que sane a su hijo?. Cuando nosotros muchas veces no
caminamos siquiera algunos metros para la misa o el culto.

 

Llegó delante de Jesús luego del trayecto para que éste pruebe su fé diciendo que si no ves los milagros no crees. ¿ Y qué hizo este hombre? ¿Acaso se devolvió rabiando porque Jesús no tuvo lástima de el? ¿Como hacemos muchas veces en los grupos a los que asistimos? No. El hizo lo mejor que pudo, no pensó que Jesús no estaba teniendo lástima, sino que recurrió a la bondad de Jesús.

 

Amigos, si nosotros hiciéramos lo mismo en vez de buscar que Jesús diga: "pobrecito".

Aparte de todo, Jesús le dice que no hace falta que el fuera, sino que su hijo estaba sano. En ese entonces no había teléfono para llamar y preguntar a ver si era cierto. Ese hombre tuvo que devolverse caminando un día de camino, dormir sabe Dios en qué posada y levantarse con las palabras de Jesús en su mente. Se podría pensar que pasó turbulentas horas de duda y caminata sin saber si aquello era cierto, pero la Biblia cuenta muy claramente la actitud de aquel padre desesperado por su hijo. "El hombre creyó en las palabras de Jesús y se puso en camino".


Qué diferente sería el mundo si nosotros creyéramos en las palabras de Jesús.

 

 "Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin de la historia" (Sn Mt 28.20). Con eso bastaría para caminar días enteros sin preocupaciones, confiando en la promesa de Jesús.

Este es un maravilloso día para escuchar a Jesús y volver por nuestro camino, confiados en que no estamos solos, sabiendo que no necesitamos lástima de Dios sino su bondad y su gracia, y que con eso nos es suficiente.


¿Cuánto has caminado para buscar a Jesús? No importa cuanto tiempo. Es hora
de que creas que el milagro está hecho, y regreses creyendo en el. 


Aunque tengas que esperar un día de camino para ver con tus ojos ese milagro.