El arca de Noé en el arco iris

Autor: Diego Quiñones Estévez

 

 

En tu infancia soñabas que después del diluvio,
el arca de Noé se encaramó en el arco
iris, y lejos de rayos y tempestades,
navega por los siete colores de los cielos.
Aprendiste en las aves, sus periplos secretos:     5
Por los espacios rojo-rubí, busca el tesoro
de la sabiduría que siempre arde en las bocas
de quienes se alimentan de la palabra eterna.
Por los mundos naranjas, ascienden, invencible,
hacia la extraña música que inunda los espíritus     10
y los sentidos hasta hundirlos en la paz.
Por los espacios de ámbar-oro, siente el imán
de fuerzas que proceden del oculto poder
divino y acrecientan la luz del corazón.
Por los espacios verde-esmeralda, escruta     15
los espejos amigos de los ojos del alma,
donde nacen la pura verdad y la belleza.
Por los azules ámbitos turquesas, se abandona 
al viento que el amor de Dios eternamente 
avienta en los litorales del infinito.     15
Por los espacios de añil-zafiro, boga
la quietud celestial, en transparencia límpida,
que te empuja al sueño de la mano de Dios.
Por los espacios purpúreos, navega en bonanza
hacia la ciudad donde viven Dios y los hombres,     20
en perfecta armonía de paz y entendimiento.