Momentos de Paz

A Dios vamos...

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB



“ A Dios vamos con lo que somos y nos acepta así; no de otro modo”


Señor, mi hija es apenas una aprendiz de mujer, una luz recién nacida, un sendero no pisado y ya, sin embargo, en este mundo que galopa y vuela, quiere sentirse y considerarse mujer.

Su cuerpo ha crecido bellamente y es la admiración de cuantos la miran.

Quisiera, Señor,- como madre-, que en ella vieran no simplemente un cuerpo bello y bien hecho, sino las bondades que he derramado en su corazón, todavía virgen.

Si los jóvenes y los hombres tuvieran un mínimo de delicadeza, pensarían en las madres cuyo reflejo gravita en ellas, cuyos desvelos desde que nacieron los han dedicada a ellas.

Me da vergüenza de que alguna gente vea en ellas objetos y no figuras de tu belleza.

Señor, toma en tus manos a mi hija. Sea tu voluntad, y no los deseosa vanos de esta sociedad que tan sólo ve en ella anhelos de pérdida de inocencia.

Le ayudaré en este camino de oscuridad para que su hermosura nunca se pierda.

Seré una buena madre como yo, Señor, que contigo, la he traído al mundo con tu amor y con tu bondad, derramadas en nuestro marido y en mí en una noche de amor limpio como azucenas.

Decía una joven: “ Señor, he venido a este mundo por amor. Haz que de mi persona joven, los jóvenes vean tan sólo el amor en mi cuerpo y en mi alma”.

¡Vive hoy feliz!