¿Judas, un héroe?

Autor: Josefa Romo Garlito

 

 

National Geographic ha editado el “evangelio de Judas”, que ni es evangelio ni pertenece a la época de Jesús ni pudo escribirlo Judas. En Televisión se han apresurado a sacar la noticia a la pantalla.

¿Una nueva mirada a Judas, como un héroe? ¡Vamos, hombre! A quien es ladrón y traiciona a su amigo y bienhechor, ¿se le podrá enaltecer, salvo por alguno de su igual? El traidor es el prototipo de la ruindad del alma. El hecho de que el Señor anunciara la traición de Judas en la Santa Cena - antes anunció su muerte de cruz y la de Pedro-, sólo supone que Jesucristo, como Dios, conocía el futuro; pero no que maneje la voluntad libre que Él mismo dio a los hombres como el mejor de sus regalos después de la vida. Una cosa sí sucede: Dios, en su providencia, puede sacar bien incluso del mal – eso que decimos nosotros: “no hay mal que por bien no venga”-; pero lo malo no se convierte en bueno.
Gracias a la libertad podemos tener virtud y cooperar a nuestra salvación. Hablar de determinismo es ignorar la economía divina de la salvación. Él conoce nuestros pensamientos, respeta nuestra libertad y no manda a nadie ejecutar el mal. Como justo juez, nos pedirá cuenta de nuestras obras nacidas de la libertad, y, como Amor y Misericordia infinita que es, está dispuesto a perdonarnos cuando nos arrepentimos con sinceridad.

El manuscrito en cuestión del mal llamado evangelio de Judas, se escribió en el siglo II y pertenece a la secta Cainita de los gósticos, traducido al copto en el siglo III o IV, de donde los saca National Geographic. Es muy posterior a Judas y fue conocido ya por San Ireneo, que lo cita en su libro “Contra los herejes” (siglo II). Los gnósticos eran elitistas y amigos de conocimientos ocultos que se enseñaban por grados y no a todos. No les preocupaba la santidad de vida, en tanto veían malo el cuerpo y el sexo, realidades queridas por Dios. Para ellos, el mundo es una ilusión y no una realidad seria en donde batallan el bien y el mal. Escribían sobre temas de moda (hubo gnosis del judaísmo, de los cultos egipcios...). buscando el éxito de sus escritos “como sea”.