Los frutos del Opus Dei

Autor: Josefa Romo Garlito

 

 

El Opus Dei ha estado sobre el tapete de todos los medios por la canonización de su fundador, san Josemaría.
He tenido la oportunidad de conocer a algunos y me gustaría contar mi experiencia. En una ocasión, a una compañera mía la habían invitado a un acto en una residencia del Opus Dei en Salamanca. La acompañé para observar, pues había oído tantas cosas negativas.
Buscaba ver su opulencia y sólo descubrí buen gusto, en un ambiente acogedor y hogareño. Otro día volví al mismo sitio invitada por una joven universitaria de la obra, que desconocía mi impresión sobre su residencia.
Me llevó a su habitación. Aquí me quedé a cuadro por su austeridad y su espíritu de pobreza. Más tarde tuve una compañera del Opus Dei. Se distinguía por su elegancia sencilla, por el entusiasmo que ponía en hacer bien su trabajo y, sobre todo, por su exquisita caridad; cuando alguno tenía un problema, se desvivía y se ponía en marcha para ayudarle, sin que se lo pidieran. Era una hija fiel de san Josemaría Escrivá.
Ahora puedo decir que al Opus Dei lo conozco por sus frutos.