“Arte y dogma de fe”. Los milagros

Autor: Josefa Romo Garlito

 

 

Con este título, leí un artículo firmado por Juan. Menos mal que el autor se llama sólo Juan (así no corre el riesgo del ridículo). Cuando se mete en el terreno religioso, aquí deja ver su falta de cultura en estos temas de los que tantos hablan y tan pocos conocen. ¿ Será porque hoy se lleva y es “progre” denigrar la fe y a la Iglesia ? A mí me parece que cada uno debe escribir de lo que sabe o informarse antes. Las apariciones no son dogmas de fe – ni siquiera lo son las de la Virgen de Lourdes y de Fátima, y eso que éstas las ha aprobado la Iglesia , tan cauta en aceptar apariciones. En cuanto a los milagros, un cristiano sólo dejaría de serlo si no creyera en el de la Resurrección de Cristo. Pero, ¿ alguien se atrevería a negar, por ejemplo, el famoso milagro de Calanda en el siglo XVI, atribuido a la intercesión de la Virgen del Pilar? Además de que estuvo a la vista del pueblo y se inmortalizó en el Arte, la resurrección de la pierna cortada a Miguel Pellicer está certificada por notarios. La realidad, salvo que uno esté aturdido o ciego por el odio o los prejuicios, es que los milagros existen, que para Dios nada hay imposible. ¿Recordamos el ocurrido al Doctor Manuel Nevado Rey, natural de Herrera de Alcántara (Cáceres)? Radiólogo, padecía radiodermitis ( cáncer de piel) a causa de su profesión. Un amigo le dio una estampa del Padre Escrivá de Balaguer y comenzó a mejorar progresivamente, viéndose completamente curado a los quince días de encomendarse al santo. Su caso fue estudiado por médicos eminentes durante diez años antes de que el Romano Pontífice se pronunciara sobre el caso. Recientemente, ha saltado a la Prensa , el milagro ocurrido a la religiosa francesa Marie-Simon-Pierre, repentinamente curada del Parkinson, que sufría desde 2001, tras encomendarla las monjas de su Comunidad a la intercesión de Juan Pablo II. ¿ No cree Juan en los milagros? Pues que no crea; pero que deje en paz a los que encuentran esperanza y consuelo en su fe.