Los símbolos religiosos Josefa Romo Garlito

Ha sido noticia: la abogada Zoubida Barik fue expulsada por el juez Bermúdez de un juicio en la la Audiencia Nacional por llevar velo. ¿Tolerancia? ¿Respeto a la diversidad? No faltan, tampoco, los que se oponen a la libertad religiosa de los cristianos, como si la seña de identidad de nuestra cultura española fuera el comunismo ateo y no el Cristianismo.

Algunos confunden aconfesionalidad con antirreligiosidad, laicidad con laicismo. No saben que España no es un Estado laicista sino laico y que se debe respetar la libertad religiosa de todos, derecho básico, fundamental. ¿A quién puede molestar, por ejemplo, un crucifijo en el aula? A intolerantes y a comunistas añejos. ¿A quienes puede herir la mirada al Crucificado? ¿No será a los hipócritas que no quieren ver, en esa imagen, a todos los que son víctimas de la injusticia? A los justos y respetuosa con todos, ciertamente, no. A muchos profesores, entre los que me encuentro, la mirada al crucifijo les ha aportado grandes dosis de paciencia. El padre de un chico extremeño, hace poco, decía: “Mi hijo no ha hecho la Comunión; pero no veo que pueda molestar una imagen religiosa”. Además, el crucifijo es una referencia de la cultura de nuestro pueblo, y todos deben respetarla. Quitarlo es una muestra de fanatismo.