Voz del Papa.

La caridad cambia los corazones
Autor: Padre José Martínez Colín

 

 

1) Para saber 

Cada año se celebra el once de febrero una Jornada Mundial del Enfermo. Ese día es dedicado a Nuestra Señora de Lourdes quien en sus apariciones mostró especial compasión por los enfermos y pecadores. Ha sido probado en muchas ocasiones, cómo peregrinos que han acudido a su Santuario han recibido la salud tanto corporal, como espiritual.

El Santo Padre Benedicto XVI envío un mensaje invitando a tomar responsabilidad ante la pobreza y el dolor, atendiendo especialmente a los niños, las criaturas más débiles e indefensas y, entre estos, a los niños enfermos, sufrientes, abandonados, privados del calor de una familia. De todos estos niños, dijo el Papa, se eleva un silencioso grito de dolor que interpela a nuestra conciencia de hombres y de creyentes. 

La comunidad cristiana no puede permanecer indiferente ante tan dramáticas situaciones y tiene el imperioso deber de intervenir. Como escribió el Papa, la Iglesia “es la familia de Dios en el mundo. En esta familia no debe haber nadie que sufra por falta de lo necesario” (Dios es Amor, 25, b). 

2) Para pensar 

En la gran novela de Victor Hugo, "Los Miserables", el personaje principal se llama Jean Valjean. Es un exconvicto miserable que acaba de cumplir una condena injusta. El obispo de Digne le da acogida en su casa, pero por la noche, el hosco Valjean le roba los ricos cubiertos de plata y huye. La policía lo captura por sospecha de robo y lo llevan frente al obispo, sacando de su saco sucio los ricos cubiertos. Valjean tiene vergüenza de haber defraudado la confianza del obispo. Pero entonces el obispo, en lugar de ratificar las sospechas de la policía, encubre su delito, asegurando que los cubiertos son un regalo que él mismo hizo a su huésped, e incluso lo reprende por no haber querido llevarse también unos candelabros, que de inmediato introduce en su saco.

Quizá encubrir a un delincuente merezca la reprobación de la justicia; pero, de esa manera, el obispo de Digne redime a un hombre. Enaltecido por ese gesto, Jean Valjean convertirá su vida, a partir de ese momento, en una incesante epopeya de abnegación y de caridad. El obispo de Digne entendía que Dios anida en el corazón de sus criaturas más afligidas. 

3) Para vivir 

El amor al pobre o necesitado hace mucho más que la mera justicia; no resuelve la situación económica o elimina algún dolor, pero lo que el amor salva es a la persona misma.

El Papa Benedicto XVI recordaba unas palabras de Juan Pablo II quien, ofreciendo un ejemplo luminoso en el ocaso de su vida, escribió: “Sobre la cruz está el 'Redentor del hombre', el Varón de dolores, que ha asumido en sí mismo los sufrimientos físicos y morales de los hombres de todos los tiempos, para que en el amor podamos encontrar el sentido salvífico de su dolor y respuestas válidas a todos sus interrogantes” (Salvifici doloris, 31).

Ante el día del amor, celebrado en unas partes el 14 de febrero, habría que llevar ese amor también a todos los días del año, dando testimonio del amor de Cristo. Como recordábamos anteriormente, hay que salir a acoger a las personas, especialmente a “los que están solos, enfermos, y a los que rechazan por su modo de ser”.