Para paladearlo

Autor: Padre Miguel Rivilla San Martín 

 

 

No saben bien lo que se pierden aquellos que nunca escuchan ni leen la Palabra de Dios en la Biblia. Dios por medio de ella nos ilumina y alimenta de un modo incomparable. Ella es la Verdad y la Vida para los creyentes. Un solo renglón de la Biblia, puede ser más provechoso para un alma sencilla que todos los tratados de una rica biblioteca.

He aquí un breve extracto del libro de la Sabiduría que fue proclamado en todas las iglesias del globo el pasado domingo. Invito a quien lo desconozca a que lo lea, lo medite, lo saboree e incluso lo paladee. Es de una belleza literaria y de una profundidad teológica singular. Es una faceta de nuestro Dios. Es una joya.

“Señor, el mundo entero es ante ti como grano de arena en la balanza, como gota de rocío mañanero que cae sobre la tierra. Pero te compadeces de todos, porque todo lo puedes, cierras los ojos a los pecados de los hombres, para que se arrepientan. Amas a todos los seres y no odias nada de lo que has hecho; si hubieras odiado alguna cosa, no la habrías creado.

Y ¿cómo subsistirían las cosas, si tú no lo hubieses querido? ¿Cómo conservarían su existencia, si tú no las hubieses llamado?

Pero a todos perdonas, porque son tuyos, Señor, amigo de la vida. Todos llevan tu soplo incorruptible. Por eso, corriges poco a poco a los que caen, les recuerdas su pecado y los reprendes, para que se conviertan y crean en ti, Señor.” ¡Que te aproveche, hermano¡