El golpe

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

Resulta que había dos amigos que un mal día se enemistaron por problemas de dinero. Uno de ellos era rencoroso y un tanto cobarde. Consciente de que el otro era más fuerte, hábil y listo que él, buscó la forma de vengarse. Pensó mucho y caviló más. Finalmente optó por lo que consideró más sutil y al mismo tiempo venenoso. Como su amigo tenía una hermosa familia, una esposa virtuosa y ejemplar y unos hijos angelicales, se le acercó un día a contarle que al parecer una personas de mucha confianza habían visto a su esposa tomada del brazo con otro hombre. Se lo estaba contando y recreando la escena seguro de que inocularía en la mente y corazón el virus de la duda, cuando de pronto su amigo le descargó tremendo golpe en la cara. La sangre no tardó en correr por las narices y escupir colmillos por la boca. -¿Quién te crees tú para insultar de ese modo a mi mujer? Jamás perdonaré a nadie que arroje la menor sombra de duda sobre su honor-. Desde luego que este golpe puso punto final a esta relación y a nosotros nos deja una enorme enseñanza, la de saber confiar en los nuestros y no dejar lugar a la duda que carcome y erosiona el alma.