Voto católico

Autor: Padre José Manuel Otaolaurruchi, L.C.

 

 

Este domingo Colombia decide en manos de qué candidato quiere confiar el destino de la Nación. Aunque el voto es secreto y todos participan en calidad de ciudadanos, sí existe un voto católico en el sentido de darle el respaldo a aquella persona que está dispuesta a velar por los principios culturales, religiosos y nacionales en los cuales hemos nacido y que constituyen nuestra identidad. Por eso es necesario sobrepasar la barrera de las apariencias publicitarias, de las simpatías e ir a los principios rectores que cada candidato encarna y por ende es lógico que quiera defender. Hacernos algunas preguntas como por ejemplo: ¿Cómo vive y qué piensa cada uno acerca de la familia, promueve la unidad o favorece las políticas de separación y las uniones homosexuales? ¿Qué piensa del valor de la vida, la preserva a través de una correcta educción sexual o encuentra en el aborto una salida fácil al problema de los embarazos no deseados? Analizar a las personas que cada uno está asociando a su equipo de gobierno, si son prez de honestidad, compromiso social y eficacia o por el contrario son el típico demagogo que aplica el refrán: “prometer, prometer y prometer hasta llegar al poder, y una vez logrado el objetivo, olvidar lo prometido”.