El mundo es un pañuelo...
Autora: Kary Rojas
El mundo es un pañuelo que a todos y cada uno nos ha de envolver, por eso cuando menos lo imagines, te darás cuenta que todos los hombres y mujeres tienen entre si, algo que ver. Nada de lo que hagas o dejes de hacer se podrá ocultar; tarde que temprano todo se va a saber, el mundo entero se ha de enterar.
El Mundo es un pañuelo y muchos nos lavamos las manos en él, queriendo evadir la responsabilidad de lo que desde nuestro ser y hacer pueda suceder; nuestras obras u omisiones pueden transformar o deformar, limpiar o manchar la realidad de este pañuelo, rasgarlo, embarrarlo, limpiarlo o poderlo remendar.
El Mundo es un pañuelo y todos hacemos parte de él, nadie tener derecho de rechazar, discriminar, señalar o injuriar; y aunque cada uno ocupe un lugar diferente, no tiene que creerse menos o mas, a todos nos cobija este pequeño gran pañuelo, a él pertenecemos, es nuestra casa nuestro hogar; y si un mismo cielo nos cubre, somos hermanos y como tal debemos tratarnos, para lograr así bordar en cada rincón de este pañuelo el amor y la paz.
El Mundo es un pañuelo y lo que ates o desates, enciendas o apagues, construyas o desbarates, saldrá a la luz, vencerá la oscuridad; no te sorprendas si encuentras a tu paso, personas que aunque desconocías que existían, ya de ti sabían o con tus amigos compartían, por eso ten mucho cuidado con lo que hagas o digas, no sea que sin pensarlo ofendas o castigas.
El Mundo es un pañuelo en el que se enjugan lágrimas, se derrama sangre, se vendan los ojos, que impiden ver la realidad que aunque a veces parece lejana a todos nos llega y nos golpea, no es para nosotros ajena El mundo es un pañuelo y no te extrañes con lo que encuentres o halles, gente que ya te conoce, otros que alguna vez creíste conocer, por eso no hagas a otros lo que no quisieras que te hicieran y trata como ser tratado esperas; porque este pañuelo que es el mundo, nos sorprende, nos envuelve, nos quita y nos devuelve el mismo gesto que hagamos, por eso lo mejor es que todo aprendamos a aceptarnos y amarnos como hermanos.