Desvaneciendo...

Autora: Kary Rojas

 

 

Porque lo urgente muchas veces deja de lado lo realmente importante, se nos puede escapar el tiempo, dando respuesta a lo que creemos primordial, descuidando aquello que tenemos y que luego cuando lo perdemos nos damos cuenta que era realmente para nosotros lo esencial…

Y la voz se apaga, agotada de tanto esforzarse por querer romper el silencio, que luego cuando se calla, del tiempo y la distancia se vuelve a apoderar; y el corazón se cansa de suplicar atención, de añorar un poco más de importancia y soñar con esas pequeñas cosas que le dan un inmenso sentido a cualquier relación… Y se pierde la magia sin poder evitarlo, a la ausencia del cuerpo y el alma nos vamos acostumbrando, porque todo aquello que no se alimenta, se acaba, se escapa y cuando nos damos cuenta, es demasiado tarde, ya no se puede jamás recuperarlo…

Con todo esto y sin lograr evitarlo, me estoy dando cuenta que ya me estoy acostumbrando a que no estás, y aquello que tanto añoraba, ya no lo espero, porque me llenaba de vacío y de soledad, saber que esos instantes como antes no volverán; la palabra dicha o el detalle que ya no existen porque al parecer el tiempo no te da para más, y aunque quizás solo requería de un minuto o menos, me hacía ser inmensamente feliz y tocar con mis manos el cielo, sintiéndome en él toda una eternidad… Ahora, poco a poco tu imagen, va siendo solo un recuerdo, que solo aparece cuando intento aferrarme a ello, porque es tanto lo que te quiero, que no me resigno a tenerte que olvidar; pero como al pensarte y añorarte me duele el alma por sentir que las cosas han cambiado tanto y ya nada es igual, prefiero dejar bien escondidos y
olvidados todos y cada uno de mis recuerdos y no volverlos a sacar para no llorar.

Hacías parte de mi presente y soñaba conservar para siempre aquello tan especial y mágico que nos estaba uniendo, pero ya te haz acostumbrado a estar lejos y es difícil que solo una persona sea la que esté fortaleciendo los lazos, sosteniendo lo que sin alimentarlo se va desvaneciendo y no da para más.

No existe espacio para las palabras y los pequeños instantes que recargaban la magia y nos hacían sentir realmente especial; ahora hay cosas más urgentes que se roban la más mínima oportunidad de retroalimentar lo que entre dos estábamos construyendo y nos llenaba de fuerza y de paz en los momentos de mayor dificultad.

Cuando reviso en mi interior y percibo la fuerza y transparencia que tenía en mi corazón este sentimiento, me da mucha tristeza pensar que al sentirte tan lejos y llorar, me cuesta tanto evitar que todo esto se esté desvaneciendo; siento que sin poder evitarlo te estoy perdiendo, por eso poco a poco te voy soltando, aunque me duela demasiado dejar de sentir por ti eso tan hermoso que quizás sea difícil vuelvas a encontrarlo, por la fidelidad y grandeza que lo invadía y lo valioso que te estaba ofreciendo; pero no puedo hacer nada más, la magia que se acaba no se puede recuperar, apreté con
fuerza mi mano para que no te me fueras a escapar, y ahora que la he abierto me di cuenta que estaba aferrada a nada, ya me habías soltado y hace algún tiempo, a estar sin mi te habías acostumbrado… solo recuerdos que duelen van quedando, todo se fue desvaneciendo…

Qué difícil es contemplar que aquello que con tanto amor quise cuidar, se está muriendo, se que en mi corazón un vacío enorme va a quedar, porque has sido para mi alguien demasiado especial, por eso te digo con toda seguridad, que las puertas de la habitación siempre abiertas estarán, yo estaré ahí para ti, conmigo siempre contarás, esa fue y será mi promesa para toda la eternidad…