Cuando me miras...

Autora: Kary Rojas

 

 

Cuando me miras y te ríes... lo que a ti te causa gracia, a los que me aman y a mí, me causa dolor... hay risas burlonas que no expresan alegría, sino crueldad de quien las lanza y nos puede debilitar la autoestima y taladrar el corazón .... Por eso te invito a que no te rías de mí, sino que sonrías conmigo, cuando aprendas a sentirte agradecido con todo lo que el Amigazo Dios te ha bendecido...

Cuando me miras y me señalas, me doy cuenta que te fijas solamente en las apariencias y me mides o juzgas por lo que a simple vista contemplas... Se que si te das la oportunidad de conocerme un poco más, descubrirás aquello que en sí tiene en mi mucho más valor, hasta querrás compartir conmigo la vida y aprender de todo lo que puedo ofrecerte desde lo que soy.

Cuando me miras con curiosidad, entiendo que a veces lo que vemos nos llama mucho la atención... no es malo querer saber un poco más y preguntar aquello que quizás no le encuentras explicación; si lo haces con prudencia y respeto, será mucho más fácil compartirte mi experiencia y darle respuesta a tu inquietud...si prefieres no decir nada, no te preocupes... las miradas curiosas llenas de inocencia, no hacen daño y a veces pasan desapercibidas o agradan....

Cuando me miras con lástima o compasión, simplemente porque tengo una discapacidad, déjame enseñarte que ser un poco diferente no es desgracia ni castigo de Dios, es tan solo una muestra de su inmenso amor a la humanidad... El busca de mil formas dar testimonio de su grandeza y se las ingenia escondiéndola en lo más frágil, sencillo y pequeño que ha de crear... Para nosotros, tener capacidad diferentes, es una bendición, porque aprendemos demasiado de los esfuercitos de más que cada día realizamos, es una oportunidad que el Amigazo nos da, para desarrollar nuestra fortaleza y creatividad, así tu mismo te sorprenderás de todas las cosas que al superarnos logramos...

Cuando me miras y me sonríes... me invitas también a sonreírte con amabilidad, es emocionante sentir que al verme te transmito paz... hay sonrisas que saludan, aprueban, motivan, halagan, estimulan... esas sonrisas son muchas veces la llave que abre las puertas y permite que surja la amistad... son sonrisas que se contagian e invitan a sonreír más...

Cuando me miras y me saludas, se que esperas de mí que también te quiera saludar... hay gestos que generan respuestas espontáneas, y un saludo respetuoso y formal, hace que la otra persona sienta agrado de corresponderte y saludarte igual..

Cuando me miras como uno más, me demuestras que sabes valorar y respetar la diversidad; cuando me miras y no dices nada, hasta pensaré que no te diste cuenta que yo pasaba... y si miras fijamente a los que me acompañan y analizas todo de mi, tal vez logres incomodarnos y hacer sentir mal a los que están junto a mí... muchas veces sufrimos más por el daño que causan las miradas en el corazón de quienes caminan con nosotros y tanto nos aman, nosotros aprendemos a vivir con eso, pero ellos sufren por nosotros y por ellos...

Y si cuando me miras fijamente, te das cuenta que lloro, sonrío, me enojo, caigo, me enamoro, rezo, me enfermo, hablo o no digo nada, si al verme te das cuenta que camino diferente o con mucha dificultad, no te sorprendas de nada, no me aplaudas exageradamente, ni me compadezcas, déjame expresar libremente mi humanidad; tengo derecho a vivir estos momentos como cualquier otra persona, trátame con naturalidad, no intentes solucionarme todo, ni ponerme las cosas más difíciles; si al verme y descubrirme, deseas apoyarme, bríndame sinceramente tu cariño y amistad, no me hagas una persona dependiente, no dejes que me acomode en mi silla, ni intentes solucionarme todo...camina a mi lado, dame tu mano, sujeta mi silla si me ves tambalear y si te cansas, descansa en mi corazón, que yo tengo mucho para dar y puedo hacerte crecer con todo lo que Dios en su inmenso amor me ha querido regalar...

Si cuando me miras, descubres a Dios en mí... has logrado ver con los ojos del corazón, aquello que a simple vista se hace invisible y es realmente valioso y esencial... solo alguien que conoce y siente a Dios sabe verlo y descubrirlo en los demás...