Mas alla de todo eso...

Autora: Kary Rojas

 

 

No te quedes contemplando la flor y el fruto del árbol que divisas, piensa en todo lo que asumió la semilla que le dio vida; la soledad y oscuridad en el terreno, la sensación de morirse por dentro, el desprendimiento de sus entrañas de aquellas raíces que deben aprender a crecer, sostenerse fuerte y aferrarse al suelo…

No admires las metas que otro ha logrado, ni te quedes aplaudiendo como si fueras testigo de un show; más allá de todo eso está todo lo que hizo para llegar hasta donde llegó, cuántas caídas tuvo?, cuántas veces se sintió fracasado?, qué lo impulsó o motivó, quién reparo sus pedazos?... Date permiso de escuchar lo que puede contarte de sus sueños y lo que luchó para hacer realidad así sea tan solo, uno de ellos…

No te limites a ver la belleza del jarrón, ni lo fino y costoso que puede ser su valor; más allá de todo eso, está su naturaleza de barro, la fragilidad que lo caracteriza, la docilidad que le permite dejarse modelar por el Hacedor de su vida, la terquedad que manifiesta cuando se endurece y se revela, el dolor que experimenta, cuando se somete al horno que lo calienta, para darle firmeza… Más allá de la obra que admiras, está todo lo que tuvo que pasar para ser fruto de la inspiración de su artista…

No te conformes con suspirar y decir que lindo es que un sentimiento pueda durar tanto; más allá de todo eso, hay que aprender de las batallas que enfrenta, de la entrega y fidelidad de quienes lo experimentan y lo cuidan dando la propia vida; el tiempo en que se ha mantenido, se debe a lo fuerte que se ha hecho, enfrentando con libertad y donación, las dificultades, las tormentas, las acechanzas de quienes usan las palabras, la rutina, la envidia, la duda y la mentira, para terminar con la promesa de un para siempre que quiere hacerse vida…

No anheles alcanzar una estrella por lo alto que está o el brillo que destella; más allá de contemplarla, mirando hacia el cielo, sintiéndolas inalcanzables desde donde estás; descubre como logran brillar y se ubican en el firmamento, se dan cuenta de lo que son y pueden dar luz, cuando percibe y reciben de las demás hasta que aprenden a hacerlo por sí mismas y realizan su misión de inspirar, guiar y alumbrar… Los seres humanos debemos entender que así como ellas, necesitamos dejarnos iluminar, para llegar a ser estrellas que con su vivir guían, dan luz e inspiran a quien las logra divisar…

No te quedas admirando lo que otros son y hacen, más allá de lo que a simple vista se cree o se ve, hay todo un camino recorrido, una historia que se ha escrito, muchas piedras, caídas, derrotas, instantes de soledad, quebrantamientos y heridas… No te limites solo a hablar por lo que supones o por lo que ves, hay que reflexionar en el génesis de cada cual y cada quien. En la vida nos conformamos y acomodamos en el papel de espectadores que juzgan o aplauden, alaban o critican, se conforman con las apariencias o con el final de la película; le damos más importancia al marcador, para aplaudir al que gana y señalar al que perdió; así sucede en la cancha de este universo, donde nosotros mismos, sin darnos cuenta, somos los protagonistas de nuestro propio cuento y alguien más a su manera lo está leyendo y refiriendo… 
Tiene más sentido reflexionar cómo le hizo para llegar hasta ahí? Qué tuvo que afrontar, cómo logró vencer y superar las piedras, las tormentas, los vacios, los fracasos, la soledad?...
Más allá de lo que se ve a simple vista, hay que aprender a contemplar cómo en su humanidad, actúa la Divinidad y qué es lo que inspira y hace inspiradora su vida para los demás…