Un minuto con Dios

Señor, y hoy, como estas ?

Autor: Luis Céspedes Soto

 

 

Señor, y hoy, como estas ?, nosotros de nuevo con nuestros sentimientos encontrados con un sabor de deseo el cambio, pero mas fuerte la aberración y enamoramiento al mundo, pero bueno, esperando en ti, confiados, llenos de optimismo, porque sabemos que poco a poco, tu como la gota que golpea la roca, produciendo al final de cuentas una hendidura así mismo tu, taladras nuestros pensamientos, palabras y obras 
lentamente si, muy lentamente quizás, pero ninguna palabra tuya regresa a ti, estéril, sin fruto, sin haber dejado en los corazones una inquietud capaz de mover montañas.
Nuestras simientes se mueven, como terreno sacudido por las pezuñas del ganado en desbandada, así en igual forma se acelera nuestra alma al pensar en ti, al saber que 
Podemos contar contigo, minuto a minuto, hora a hora, día a día, por siempre, por la eternidad, solo esta en nuestras manos y en nuestro deseo, el querer viajar contigo por las adversidades y alegrías, por las soledades y tristezas, que al fin de cuentas son parte de nuestra vida y si las tomamos entre manos, simplemente se nos escapan por entre los dedos, dejando al descubierto nuestras debilidades, que lejos de frustrarnos, debemos verlas como regalos, pues con ellas, mas pronto llegamos hasta ti, de rodillas, mal heridos y el dolor de la incertidumbre reflejada en nuestros rostros.
Pero si eres tu quien juntas nuestras manos, como el niño bajo el consuelo de sus padres, que se sume en el abandono total y confiado, dejando tras de si, el frió de la indiferencia porque sabe que podrá el mundo derrumbarse mas el por siempre estará seguro, que cuenta con la seguridad plena de que alguien velara por el y su sueño podrá ser tranquillo y sosegado, a pesar del ruido que deja el pasar de la vida, que viaja en el tren de la preocupación, en busca de un mañana fugas, que por haber dejado atrás su equipaje, grita y se lamenta porque siente que se ha quedado olvidado.
Oh, Jesús que mi alma te alabe, que mi alma en ti se goce Señor, que el fuego de tu Santo Espíritu, encuentre una buena morada dentro de mi, para que por siempre podamos recorrer los mundos, como amigos inseparables que ansían encontrarlo todo para tener que compartir.

Señor, que el mundo que todo lo niega, reflexione un poco, a ver si viene de menos a mas, buscando siempre encontrar la dicha, en un mundo nuevo, en un mundo de paz, dentro de la familia, que es en donde, a ti podremos encontrar.

Amen.
Paz y bien.