A Santa María

Autor: Padre Pedrojosé Ynaraja   

 

 

Escribí no hace mucho sobre ello. Fue un día que contaba que en Nazaret había visitado una institución dedicada a fomentar universalmente su devoción y que ayuda a mantenerla a diario mediante una reflexión llamada “un minuto con María”. (en Google se encontrará,  escribiendo la expresión). Personalmente, cada mañana, después del rezo de la Liturgia de las Horas, voy a Internet y leo el e-mail que me llega. Obviamente, no aseguraré que cada día me resulte un acertado momento de plegaria, pero sí la gran mayoría y que va renovando diferentes aspectos de mi aprecio a la Virgen. Hace poco contaba los orígenes antiguos de Lourdes, en tiempos de Carlomagno a través de la imagen de la “virgen negra”de la Catedral de Le Puy en Velay y ahora, cuando estoy escribiendo, relata parte de las memorias de Don  Bosco, donde cuenta sueños marianos que condicionaron su vocación de educador. Mañana, cuando ya haya enviado el artículo, leeré el correspondiente y meditaré otro aspecto.


Voy a recomendar otro recurso. Me llegó, como llegan tantos, un power-point titulado “cántico de María”. Quedé asombrado al conocerlo. Lo he enviado a diferentes personas, como power-point y pasado a DVD para que a cualquiera, con su ordenador o su reproductor, le fuera asequible. He hecho algo más. Pasado a impresora y en papel fotográfico, es un precioso álbum de 9 láminas, que le permite a uno tenerlo en cualquier lugar y meditar el contenido, o regalarlo a una persona amada. Aquí quería llegar. Poco antes de Navidad, una amiga, siguiendo indicaciones mías le envió, el álbum y el DVD, entre otras cosas de mayor valor económico, al insigne obispo Casaldáliga. Copio textualmente un párrafo de su acuse de recibo: “de todo corazón te he de dar las gracias por tanto cariño y recuerdo y regalos. Han sido unos reyes espléndidos. .. Gracias especiales por este álbum de fotos y CD con el Cantico de María. Al obispo Leonardo le ha gustado mucho…”


Ahora me doy cuenta que he escrito mucho sin explicar nada. Rectifico mi error.


Los destinatarios y elaboradores del Magnificat, himno que nos llega en el evangelio de Lucas, eran cristianos de primera hornada, habitantes de Jerusalén y con rico acervo bíblico. Quienes conocemos un poquito el Antiguo Testamento, descubrimos de inmediato los resabios del cántico de Ana la madre de Samuel y sabemos algo del patriarca Abraham. Pero hoy en día hay menos cultura bíblica y el texto puede resultar, en algún momento, difícil de entender. El autor de este power-point, que desearía saber de quien se trata, pues, de seguro habrá elaborado alguna cosa más, no ha tratado de parafrasear ni cambiar el texto revelado. En unas preciosas imágenes bellas y simpáticas, que corresponden con bastante precisión al paisaje y atuendos de la época, ha introducido el texto, que expresa los sentimientos contenidos en el Evangelio. Con seguridad el contenido del Magnificat  es mucho más rico, pero con lo que dice el montaje me conformo. En diversos momentos de mi quehacer en el PC, abro el archivo y vuelvo a verlo, arropado en la sencilla música que lo acompaña. Son momentos de oración y me parece que se trate de fotos tomadas a la Virgen y que escucho sus sentimientos personales. Son cuatro o cinco minutos solamente, después prosigo mi trabajo. No desplaza este power point ni el rezo del rosario, ni las peregrinaciones, ni otros recursos. Búsquese en: www.iglesia.cl/especiales/diamujer2008/links.html