La solterona y el gatito

Autor: Padre Pedrojosé Ynaraja

Libro: Si el Señor volviera tal vez...

 

 

Le comentaba un amigo al Señor:

- Maestro, en mi pueblo hay una solterona que está siempre encerrada en su casa, cumple como el que más con todo pero nadie la ha visto jamás dar un beso a nadie o hacer un regalo. Está encerrada en casa con su gatito, al que por otra parte tampoco le deja salir de su mansión. Tú nos has dicho siempre que para llegar al gozo eterno hay que amar, y yo pienso que esta mujer cumplidora fiel de todos los preceptos de la Iglesia no hace mal a nadie, pero tampoco a nadie ama  ¿tal vez estará destinada a la condenación eterna?

El Señor ya había conocido a gente así, la ausencia de buena formación había producido esta vida aberrante y no obstante nadie podía decir de ellos que fueran gente mala. Él también se había preguntado a veces como sería la salvación de personas así y como respuesta había encontrado lo que ahora iba a contar para consuelo del amigo…..

Esta pobre mujer, esta buena mujer, se salvará, no lo dudes. Se salvará porque cumple los mandamientos e incapacitada para otro amor, ya que nadie nunca le enseñó a amar al prójimo, aunque tema a los hombres, ama al gatito, que también es una criatura de mi Padre. Ha sido Él el que le ha puesto a su lado el animal para que aprendiera a querer, aunque fuese solo como una fuerza instintiva, para que le sirviera de preparación. Allá, en la Eternidad, le esperan, para cuando llegue quince gatos siameses, y uno de angora que jugarán con ella para que pierda el miedo y posteriormente pueda penetrar en las estancias celestiales y sea feliz con el amor universal de los hombres y a los hombres, que es lo único que perdura y cuenta.