Reflexión bíblica

Les aseguro "que todo lo que pidan al Padre en mi Nombre, él se lo concederá Jn 16, 23b-28 

Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

 

 

En el fragmento de este Evangelio, Jesús nos instruye como orar. Es bueno preguntarse si sabemos orar, cuando orar y porque orar. Al parecer, estamos acostumbrados a orar solo cuando tenemos una necesidad, y sucede que cuando nos va bien, pensamos que ya no es necesario orar más, como si en ese minuto no necesitáramos de Dios. Aún más, cuando las cosa nos resultan bien, nos olvidamos de dar gracias y, muchas veces ni siquiera se nos ocurre una oración de alabanza, para que decir si a veces hacemos una oración para decirle a Dios, que estamos dispuestos y disponibles a su plan en nosotros.

El Evangelio de hoy nos dice que: A la hora de pasar de este mundo al Padre, Jesús dijo a sus discípulos: Les aseguro que todo lo que pidan al Padre en mi Nombre, él se lo concederá. Jesús esta invitado a los discípulos, a que confíen plenamente en el poder de la oración y que pidan al Padre en su nombre. Ellos Han de rogar al Padre por la fe en Jesús, el Hijo de Dios encarnado. Hasta ahora ellos sabían del gran poder intercesor de Jesús –San Juan 11:22 ---. Pero no lo habían puesto a El como intercesor, hasta ese minuto no habían pedido en su nombre de Hijo de Dios encarnado.

Jesús nos garantiza que al pedir en su nombre, tendremos éxito en nuestra oración y nos asegura que todo lo que pidamos al Padre en su Nombre, él nos lo concederá. Del mismo modo como los hicieron sus discípulos, nosotros como hijos de Dios, debemos estar confiado en su recomendación.

Jesús les dice sus discípulos, les aseguro, y lo que El garantiza, es que esta oración será escuchada y, dentro de la finalidad que aquí El establece, es para una alegría que será perfecta , es decir que el gozo sea cumplido. Pero si, en aquel día, ya iluminados por el nuevo estado de cosas, tendrán el gozo cumplido al ser escuchados por pedir en el nombre de Jesús, supone esto, que lo que piden los apóstoles está en consonancia con este nuevo estado de cosas y con el Espíritu que entonces los moverá en su actuación.

Pero debemos ser concientes de que hay diversos tipos de oración, no solo la que hacemos porque necesitamos algo, también hacemos oración para purificarnos, por la que suplicamos perdón por nuestras faltas, y la de ofrecimiento al Señor para que se cumpla su voluntad. La oración para pedir es para todos las mas interesada, hacerla, es también verdadera oración, y parece que Jesús nos hace una queja; Hasta ahora, no han pedido nada en mi Nombre, de esta forma nos insta a que pidamos y que lo hagamos con confianza.

En efecto, Jesús, nos ha prometido oír nuestras oraciones, nos ha garantizado concedernos lo que pidamos, sin embargo sentimos que esto a veces no sucede, entonces debemos preguntarnos si hemos rezado bien y no pensar que la oración no es eficaz, porque la oración no debe hacerse de modo defectuoso, esta debe ser con ciertas cualidades especiales, entre ellas, con humildad, mostrando nuestra necesidad y sabiendo que le pedimos de quien necesitamos, porque ante Dios, somos al extremo, indigentes y muy necesitados de El. Por supuesto, debemos rezar con confianza de hijos que piden al Padre. Pero también con perseverancia, porque si bien es cierto que Jesús nos prometió oír nuestra oración, no nos dijo cuantas veces tenemos que pedir. Y también debemos rezar con disponibilidad, exponiendo nuestro deseo, pero al mismo tiempo dispuesto a que se haga la voluntad del Padre. 

Dice Jesús: Aquel día ustedes pedirán en mi Nombre; y no será necesario que yo ruegue al Padre por ustedes, Y como nueva garantía, Jesús nos dice que no necesitaremos que El ruegue por nosotros ante el Padre. No es que El nos niegue la necesidad de su intercesión --- San Juan 15:5; Heb 7:25 ---, sino que lo que nos quiere destacar es la confianza y seguridad con que siempre debemos hacer esta oración en su nombre, pues debemos saber que ya el Padre nos ama, porque creemos en que El ha salido de Dios.

Oh Jesús, todo los que haces, nos maravilla.

La paz del Señor Sea con Ustedes

Por comprender esto, Gracias Señor